
5 de septiembre de 2010 en el Departamento de Investigación Criminal de Lille. A última hora de la tarde, los investigadores son alertados de que una joven, Natacha Mougel, desapareció mientras trotaba en Marcq-en-Barroeil. Para la policía, encontrarla fue una carrera contrarreloj, pues sabían que esta mujer de 29 años, a punto de casarse, nunca se habría marchado por voluntad propia sin decir nada.

